El lavaplatos es uno de esos electrodomésticos que nos facilita la vida enormemente, pero que muchas veces olvidamos que también necesita un poco de cariño. Con el tiempo, los residuos de comida, grasa y minerales del agua pueden acumularse, dejando malos olores y disminuyendo la eficiencia del aparato. ¡Pero no te preocupes! Limpiar tu lavaplatos por dentro es más fácil de lo que piensas. Aquí te dejo una guía paso a paso para que lo hagas como un profesional.
1. Reúne tus herramientas
Para limpiar el lavaplatos, no necesitas mucho, pero es importante tener a mano:
- Vinagre blanco
- Bicarbonato de sodio
- Un cepillo de dientes viejo o un cepillo pequeño
- Un paño o esponja suave
- Un palillo o un clip de papel (opcional)
2. Retira y limpia los filtros
El primer paso es asegurarte de que el filtro está limpio. Este es el encargado de atrapar los residuos grandes de comida. Ubica el filtro en la parte inferior del lavaplatos (consulta el manual si no estás seguro de dónde está) y sácalo. Lávalo con agua caliente y un poco de jabón. Si tiene residuos adheridos, usa el cepillo de dientes para desprenderlos.
3. Revisa los brazos rociadores
Los brazos rociadores son los responsables de distribuir el agua por todo el lavaplatos. Con el tiempo, los pequeños agujeros por donde sale el agua pueden obstruirse con residuos de comida o minerales del agua. Para limpiarlos, retira los brazos (si es posible) y revisa cada orificio. Usa un palillo o un clip de papel para desatascarlos si es necesario.
4. Limpia el interior del lavaplatos
Ahora que los componentes principales están limpios, es hora de darle una buena limpieza a todo el interior. Rocía un poco de vinagre blanco en un paño o esponja suave y limpia las paredes, las puertas y las juntas de goma. El vinagre es excelente para desinfectar y eliminar cualquier rastro de grasa.
5. Elimina los malos olores
Si tu lavaplatos tiene un olor desagradable, el bicarbonato de sodio es tu mejor amigo. Espolvorea una taza de bicarbonato en la parte inferior del lavaplatos y deja que repose durante la noche. Esto ayudará a neutralizar los olores y a deshacerse de cualquier residuo persistente.
6. Haz un ciclo de limpieza profunda
Una vez que todo está limpio, es hora de un ciclo de limpieza profunda. Coloca una taza de vinagre blanco en la rejilla superior del lavaplatos (puedes usar un tazón pequeño resistente al lavavajillas) y ejecuta un ciclo completo con el lavaplatos vacío. El vinagre ayudará a eliminar los residuos de grasa y desinfectará el interior.
Si quieres una limpieza extra, después del ciclo con vinagre, espolvorea una taza de bicarbonato de sodio en la parte inferior y ejecuta otro ciclo corto con agua caliente. Esto ayudará a eliminar cualquier residuo restante y a dejar tu lavaplatos reluciente.
7. Limpia el exterior
No te olvides del exterior del lavaplatos. Un paño húmedo con un poco de jabón suave es suficiente para limpiar la puerta y los controles. Si es de acero inoxidable, puedes usar un limpiador especial para darle un acabado brillante.
Consejos adicionales:
- Limpieza regular: Haz una limpieza ligera cada mes y una limpieza profunda cada 3 a 6 meses, dependiendo de la frecuencia de uso.
- Evita malos hábitos: No sobrecargues el lavaplatos y enjuaga los platos antes de colocarlos dentro para evitar que los residuos de comida se acumulen.
Mantener tu lavaplatos limpio no solo prolongará su vida útil, sino que también garantizará que tus platos salgan impecables en cada lavado. Así que, ¡manos a la obra! Verás que con estos sencillos pasos, tu lavaplatos estará siempre en perfecto estado.
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